jueves, 26 de noviembre de 2020

Herois per la Republica

Uno de mis juegos favoritos en los ultimos tiempos consiste en indagar en los motivos de cierta fama sobrevenida de personajes de los que, de pronto, se habla mucho y a todas horas en redes y medios catalanes. Se les colma de piropos, bellos adjetivos, premios y meritos mas que destacados dentro de su profesion o especialidad.

Comence hace ya mas de una decada con los fenomenos televisivos Mossen Ballarin y la monja Forcades. Ante la extrañeza de ese improvisado protagonismo de dos religiosos que se paseaban alegremente por las redacciones y platos de TV, tuve curiosidad por saber de su vida y de lo que les hacia tan relevantes y especiales.

Y di con ello: los dos personajes se habian significado por su decidido apoyo a las incipientes tesis independentistas.

A partir de ese momento, confieso que el juego me fue atrapando, creandome verdadera adiccion. Y fui haciendo lo mismo en cada ocasion en que algun personaje cobraba fama improvisada, o estaba demasiado presente en conversaciones con amigos y conocidos.

El abanico de estos altares estelados recorre practicamente todas las facetas de la vida, y se dan igual entre afamados deportistas, humoristas, cientificos, musicos e incluso algun destacado cocinero.

Asi descubri la inusitada aficion de muchos catalanes por las cumbres, gracias a Kilian Jornet, porque en el orden de prioridad deportiva aqui, justo detras del omnipresente Barça, viene el alpinismo.

Muy por detras vienen destacados campeones catalanes en diferentes disciplinas como pueden ser Pau Gasol, Marc Marquez o Mireia Belmonte, que claro esta, nunca han destacado por su fidelidad incondicional hacia la venidera Republica.

En el ambito de la escena nuestras joyas de la corona son Joel Joan e Isona Passola, pasando por encima de los exitosos Josep Maria Pou e Isabel Coixet.

En el terreno musical los focos se detienen en nuestro inefable Llach, pisoteando en muchas ocasiones la encomiable labor en la lucha por las libertades y la lengua catalana del maestro Serrat.

Uno de los casos mas emblematicos es el del humorista Pepe Rubianes. Agudo e ingenioso monologuista, se ganaba la vida en galas y giras teatrales, como todos sus colegas del genero. Hasta que tuvo la ocurrencia de juntar las palabras culo y mierda con España en la misma frase. Aaah!! aquello fue el extasis para muchos, y el principal motivo desde entonces para poner su nombre a calles y plazas por toda Catalunya. Y de su presencia habitual en TV3, cuyos estudios apenas habia pisado antes.

Y asi uno tras otro, en un suma y sigue patriotico, voy descubriendo las militancias politicas de personajes entronizados en un abrir y cerrar de ojos como pueden ser Cotarello, Fachin, Santiago Vidal o el mismisimo Oriol Mitja.

El ultimo caso acontecido estos dias, a causa del triste fallecimiento de Montserrat Carulla. Actriz de indudable valia y prolifica carrera, que sin embargo ahora mismo no son motivos por si solos para merecer el enorme despliegue mediatico-social que ha provocado su perdida, y que algunos comentarios me sugerian ciertos "meritos" ocultos. ¿Porque de quien se podria decir hoy en dia que destaco por su compromiso politico y el amor a su tierra?

Y efectivamente, su apreciada y reconocida "arenafilia", si se me permite la expresion, la hizo pronunciar frases del calibre de "En los años 60, Franco lleno trenes de inmigrantes para diluir las costumbres y cultura catalanas". Olvido esta buena señora en su alegato que, antes de esos trenes, llegaron gran parte de los recursos publicos del regimen para reactivar la economia y la industria en Catalunya (SEAT, PEGASO, Polo Petroquimico de Tarragona) y la construccion de autopistas y redes de transporte publico.

Si aquellos dineros se hubiesen invertido en el lugar de origen de los obreros y sus familias, desesperadas por escapar del hambre y la miseria, todo eso que nos hubieramos ahorrado. En Andalucia y Extremadura habrian gozado de unas condiciones de vida dignas, y en Catalunya habriamos conservado en todo su esplendor las cosas que realmente importan, como el canto del Virolai y las Jornades Castelleres.